Una casa tatuadora que tuvo como clientes a LeBron James y a Kobe Bryant demandó a los creadores del NBA 2K por “utilizar la imagen de sus tatuajes sin su permiso”.¡Pedían nada más y nada menos que 1,1 millones de euros! No sé a vosotros, pero a mí esto me parece de necios.
Ésta no es la primera vez que los creadores de videojuegos deportivos tienen que afrontar una demanda. Los del UFC Undisputed tuvieron que apoquinar 22.500 por incluir en el videojuego a Carlos Condit y sus tatuajes.
Un caso parecido es el de la película “Resacón en Las Vegas”, demandada por quien tatuó a Mike Tyson en la cara.
Mira como quedan los tatuajes en diferentes partes del cuerpo, seguro que encuentras una idea que te gusta